Mr. Arkadin, 1955

«Mr. Arkadin»  -Confidencial Report-

Orson Welles
Francia 1955

Coproducción rodada en España en blanco y negro por Orson Welles, en aquellos sus años españoles.
No creo que esta cinta sea una de las mejores del genial director. Y oírla en español es además una experiencia aterradora. La historia resulta artificial y el personaje central es poco creíble.
Un magnate de oscuro pasado embauca a un delincuente de poca monta que ronda a su hija con la solicitud de buscar el pasado del millonario, ya que éste sufrió una amnesia.

Sin embargo, tiene aspectos interesantes y la vería de nuevo si pudiera hacerlo en versión original.

Ciudadano Kane, 1941

«Ciudadano Kane»  (Citizen Kane)

Orson Wells
USA 1941

v.o.s.
blanco y negro
119 min.

Considerada la mejor película de la historia del cine. Valoración en la que estoy de acuerdo desde un punto de vista técnico, no en cuanto a argumento. Es una convención colocarla la primera, pero también pienso que es lo más adecuado.
Orson Welles era un genio. En esta su primera película, que dirige e interpreta, le dieron carta blanca para que hiciera lo que quisiera. Partió de un guión previo cuya autoría puede considerarse casi totalmente de Herman J. Mankiewicz, que para mí es lo más flojo de la película.
Lo que hace Welles con Ciudadano Kane es prácticamente reinventar el cine, el lenguaje cinematográfico, los encuadres, los planos, la profundidad de campo, etc…
El cine mudo ya se había preocupado por el tema de la profundidad de campo: es decir, que queden enfocadas personas o cosas tanto en primer plano, como en el fondo, como forma de explicar una historia. Pero con el sonoro, con sus nuevos problemas técnicos para sincronizar la voz, el tipo de iluminación y el tipo de lentes no permitía estos alardes visuales. Welles utilizó unos nuevos objetivos con más definición y adaptó la iluminación para recuperar esta forma de mostrar la historia, cuyo mérito también se debe, sin duda, al director de fotografía Gregg Toland, un pionero en nuevas técnicas visuales.
Welles no se queda en el redescubrimiento de la profundidad de campo, en exigir a su director de fotografía todo y más, compone cada encuadre y cada escena con un cuidado extraordinario, de forma que se convierten en icónicas, una lección de cine en mayúsculas. La música es de Bernard Hermann.
La parte que peor funciona en el fondo es la propia historia. No hay ningún personaje positivo. Es distante, algo artificial. Hay también el sentimiento de que la historia solo es una base para montar una estructura técnica sofisticada. Lo que produce en la audiencia que solo quiere entretenerse cierto rechazo.
Una obra maestra de cinematografía, imprescindible para los estudiantes y directores de cine.
Película en la lista AFI. Ocupa el
puesto 1 en 1998
puesto 1 en 2007

Nota
Lástima que no se encuentre una copia restaurada o remasterizada y la tengamos que ver en condiciones muy por debajo de su calidad técnica.

La dama de Shanghai, 1947

» La dama de Shanghai »  (The Lady of Shanghai)

Orson Welles
USA 1947

No me importa confesar que he necesitado verla tres veces (en dos días) para que la película me empiece a gustar. No es que con una primera visión no haya suficiente, que no lo es. Sino que primero la he visto doblada al castellano. Después en versión original sin subtítulos y una tercera vez para buscar detalles y comparar (limitaciones de los canales de TV de pago que no ofrecen subtítulos).
Situaciones personales al margen, creo que es una película que merece ser estudiada, ya que bajo una apariencia de una simple historia de cine negro nos encontramos con muchísimo más. Como historia puede ser un poco decepcionante: la trama es bastante enrevesada y algo dispersa. Welles/Michael como marinero es poco creíble y Rita Hayworth/Elsa, bien, cualquier crítica mala que haya tenido es injusta.
Si dejamos un poco al lado lo que nos cuentan: la típica narración de mujer fatal, con marido a desaparecer, más chico tonto enamorado candidato a cargar con las culpas, etc. que en sí no está mal pero no soporta ningún análisis; ¿ realmente Elsa planea algo con George ?. En fin es igual. Lo que realmente cuenta es el cómo.
Rita Hayworth / Elsa

En primer lugar tiene una dirección excelente por parte de Orson Welles, que también firma el guión, la producción y el protagonista masculino. Un prodigio del uso del encuadre durante toda la película. Sin que se vea forzado en ningún momento. También destaca el uso de los personajes: la interpretación general de todos y en particular el partido visual y dramático que se da a la cojera del abogado Banister. En cuanto a Rita Hayworth hace una magnífica actuación. Al contrario de lo que se ha dicho siempre, el tinte rubio y la melena corta la favorecen, está más atérea. No es que esté guapa, sino que parece directamente una diosa. Lo curioso es que entre Rita/Elsa y Michael/Orson haya tan poca química sexual. ¡Precisamente cuando eran marido y mujer! (de 1943 a 1948)

La cinta está llena de escenas interesantes y destacan sobre todo las finales dentro del parque de atracciones vacío, con el tiroteo en la sala de los espejos, magistral y memorable.
Ha habido algún momento que he tenido la sensación de estar ante un relato negro metafísico, tanto por lo que dicen, como por las imágenes:
George- Qué le parece Michael, ¿cree que el mundo llegará a su fin?
Michael- Bueno, alguna vez hubo un principio, así que tendrá fin

***
Elsa- ¿ Dime dónde iremos Michael ? Me llevarás contigo hasta la línea del horizonte. No me importa dónde sea, pero llevame allí.
En cuanto a la versión doblada u original, que por supuesto no hay color. El doblaje es una aberración. Cabe advertir que la versión castellana falsean el texto cuando se oye que Michael ha pasado por cárceles europeas, en realidad es España y que cuando dice que mató un hombre en Tripolí, es en Murcia y al que ha matado es a un espía de Franco en la guerra española, pero lo cambián y pasa a ser la guerra europea. Perlas de la censura.

Sed de Mal, 1958

«Sed de Mal» (Touch of Evil)

Orson Wells
USA 1958

Tengo una gran simpatía por Orson Wells. Director de varias obras maestras y un gran innovador de las estéticas cinematográficas. Pero, «Sed de Mal» soporta muy mal el paso del tiempo. Sobresale sin ningún género de duda el plano secuencia inicial; magistral, soberbio. El resto de la película hace aguas por todos lados. Y no en el sentido de la masacre de montaje que hicieron los estudios, sino a aspectos más generales.

Para empezar, la elección de Charlton Heston como policía mexicano, aunque maquillado, me parece imposible y además desacertada. Ya sabemos de entrada que ganará. Estaría mejor alguien menos potente físicamente. En cuanto a la maldad del clan de los Grandi, es pueril y casi da risa. Aquí el tiempo ha hecho estragos.

Janet Leigh nos recuerda a «Psicosis» de Hichcock, aunque fue rodada más tarde, en 1960. Pero Marlene Dietrich en un papel imposible, parece que no se haya quitado el disfraz que usa en «Testigo de Cargo» 1957 de Billy Wilder.
Los encuadres están muy estudiados y son interesantes, pero se nota demasiado su presencia.
A este paso, a esta sección podría titularla; la masacre de la obras maestras cinematográficas.