Cuentos de Tokio, 1953

«Cuentos de Tokio»  (Tokyo monogatari)

Yasujiro Ozu
Japón 1953

Un matrimonio mayor viaja desde el pueblo, donde dejan a la hija pequeña, a Tokio para visitar al resto de sus hijos. Uno de ellos médico con una consulta en un barrio periférico, una chica peluquera con un marido un poco simple, un chico que vive a medio camino entre el pueblo y Tokio, y la esposa de un hijo perdido en la guerra. Todos ellos muy ocupados con sus menesteres y con poco tiempo y ánimo para atender a sus padres. De todos ellos es Noriko, la nuera quien responde mejor y se muestra más dispuesta a mostrar respeto y dedicar su tiempo.
 
Historia que revela la desintegración de la familia en Japón, seguramente a causa de la segunda guerra mundial y la industrialización de la sociedad con la dispersión de las personas y su traslado a centros con más posibilidades de prosperar.
 

Quizá no sea la mejor idea ver esta película inmediatamente después de ver «Primavera tardía» (1949) ya que aparecen los mismos intérpretes en roles parecidos. Aquí la forma de filmar de Ozu, con su posición de cámara a la altura de personas sentadas, así como su reticencia a mover la cámara y ofrecer planos fijos y limitados, se presenta como un inconveniente, ya que notamos cierta rigidez y claustrofobia visual, que por otro lado es seguramente intencionado para representar la situación de los padres. Película considerada una obra maestra.

Primavera tardía, 1949

«Primavera tardía»  (Nanshun / Late Spring)

Yasujiro Ozu
Japón, 1949

Una joven que empieza a dejar de serlo vive con su padre viudo, un profesor, y está dejando pasar las oportunidades de casarse debido a la inercia de la agradable vida en común. Su padre se da cuenta que la lógica de la existencia hace preciso que ella se marche y cree su propia familia.
Película en blanco y negro con una buena fotografía, que se centra en la narración de los detalles cotidianos y aparentemente insignificantes de la vida. Veremos la casa en profundidad, mientras que el novio y la boda son para nuestra imaginación. Con un sentido profundo de la narración cinematográfica en la composición y el encuadre.
Una muestra de cine intimista muy estimable.