«El caballero oscuro: la leyenda renace»
(The Dark Knight Rises -Batman 3-)
Chistopher Nolan
USA 2012
De entrada y por encima de todo quiero agradecer que Christopher Nolan (Londres, 1970) no haya filmado, ni presentado la película en 3D y sin embargo, sea la sensación del momento. De hecho, dicen que el director incluso detesta las imágenes CGI (computer generated imagery)=imagénes generadas por ordenador y no por ello su cine se resiente lo más mínimo en espectacularidad.
Con este trabajo asistimos a la tercera y en teoría última entrega de la trilogía pensada por Nolan sobre el personaje de comic Batman (DC Comics): 1) «Batman Begins» (2005) y 2) «El caballero oscuro» (2008). En este proyecto la novedad radical consiste en trasladar al personaje desde un mundo paralelo, pero alternativo de fantasía, al más o menos mundo real y en el momento actual. Este ejercicio es sin duda muy interesante, pero al mismo tiempo demasiado arriesgado, ya que deben de combinarse las características de lo que ya se conoce del personaje y sus villanos e insertarlo en lo que está pasando en el mundo. Hacer una sóla película no plantea más problemas, pero alargar la acción durante siete años del mundo real con lo que cambia todo, hace que la trilogía tenga resultados diversos.
A mí en principio trasladar la acción al mundo real, no me entusiasma. La primera película de la serie me dejó bastante indiferente. Demasiado oscura internamente. Además los problemas existenciales de Batman no me interesan demasiado. No obstante, en la segunda entrega de la saga las cosas cambiaron drásticamente: tanto el argumento, la dirección, el uso extraordinario de la música, la interpretación del Joker=Heath Ledger que estaba genial, en definitiva, casi todo, dieron a la película una dimensión extraordinaria. Además en la historia podía leerse perfectamente el trauma de los Estados Unidos después del ataque del 11-S y una reflexión sobre el terrorismo y sus metafóras muy oportuno.
Después de esa esplendora segunda parte, es muy difícil, quizás imposible levantar el listón. En esta tercera parte es como si volviéramos a la primera película, en la que la conexión con la realidad no nos dice nada prácticamente de nuestro mundo de hoy. Hay alguna pequeña alusión en el tiroteo en la bolsa y en los juicios sumarísimos que recuerdan a la Revolución Francesa y algún diálogo entre Wayne y Catwoman sobre los que tienen demasiado, pero es algo anecdótico. A la gente lo que le preocupa es el deterioro del sistema financiero y del desprestigio político (algo hay), pero volver sobre el tema del terrorismo es pesado, sobre todo cuando no pueden hacerse aportaciones nuevas y todo es destrucción y caos sin más. No comprendo que en este caso los malos estén dispuestos a destruir Gotham por venganza y para castigar a Batman y además estén dispuestos a morir sus líderes también (recordemos que Osama no tenía ninguna intención de sucumbir él personalmente). Esta fascinación por arrasar Gotham=New York claramente tiene una connotaciones masoquistas excesivas. No me extraña que las autoprofecías acaben cumpliéndose
Así que volvemos a mundo de Batman puro y duro. Han pasado algunos años y Batman/Wayne vive retirado y en malas condiciones físicas. Todos están más mayores: Batman, Gary Olman=Gordon, Michael Caine=Alfred, … Llega un nuevo malvado a la ciudad Bane=Tom Hardy y de nuevo empieza la lucha.
El personaje de Bane, que aparte de ser una frustración total para el actor, ya que no logramos ver casi ni un momento a Tom Hardy, y su interpretación apenas luce con esa máscara, tan sólo en el final cuando su ojos se enternecen y rueda una lágrima. Bane no es lo suficientemente carismático para mantener la función, la máscara le impide ser más expresivo. Aunque Nolan sabe distribuir el peso de la interpretación entre todos los personajes y hay que reconocer que todos se esfuerzan al máximo y algunos sobresalen como: Gary Oldman (siempre), una matizada e interesante Catwoman=Anne Hathaway y un prometedor Joseph Gordon-Levitt=Blake del que esperamos mucho.
Nolan tiene la costumbre de repetir actores, generalmente para bien, aunque espero que el equipo no se convierta en una troupe tipo Tim Burton, con lo que sin duda, perderíamos todos. Personalmente me carga la presencia de Marion Cotillard que afortunadamente en este caso tiene un papel a su medida.
La fotografía no gusta especialmente y la música que es como siempre de Hans Zimmer que se parece a las anteriores. Extrañamente cuando bailan Wayne y Catwoman suena una pieza clásica que yo diría que es la Pavana de Gabriel Fauré, pero no he podido encontrarlo, ya que la banda sonora se edita sin ella, así que no estoy segura, pero me ha sorprendido su inclusión.
Para no usar imagenes digitalizadas la acción es muy potente. Gusta la moto en este caso a manos de Catwoman y el coche volador es chulo. Hay un segundo cuando se posa en una azotea que recuerda/homenajea a «Blade Runner» (1982).
El episodio clave de la prisión, rodado efectivamente en Jodpur, Rajasthan, India, con sus exóticas murallas.
Sin embargo, lo que es la prisión en sí se parece en parte a Chand Baori que es un extraordinario y bello pozo para agua de lluvia situado a 500 kms. de Jodpur, pero que es a cielo abierto y ya salía en la película «The fall» (2006)
Por otro lado, no dejo de preguntarme respecto a este episodio el por qué «el mercenario» deja que lo sustituyan en la prisión y cómo después y durante diez años por lo menos no hace nada por rescatarles. Bueno, son preguntas que no debería hacerme.
En definitiva, es potente, intensa, buenas interpretaciones, acción… más parecida a la primera que a la segunda.
|
Christopher Nolan |