El hombre mosca, 1923

poster de la época que pone en evidencia
que la escena del reloj no se consideraba
la más importante

«El hombre mosca»  (Safety Last !)

Fred C. Newmeyer, Sam Taylor
USA 1923

muda
73 minutos aprox.

Harold Lloyd (Nebraska, USA 1893-1971) fue un cómico enormemente popular del cine mudo, que competía directamente con Charlie Chaplin y Buster Keaton. Su personaje principal consistía en un muchacho alegre y esforzado, ilusionado por mejorar socialmente. Las gafas redondas de carey eran su marca.
Tuvo una gran carrera en el cine mudo y mucho más discreta en el cine sonoro. Prácticamente se retiró en 1938 con 45 años. Aunque haría alguna intervención posterior. Afortunadamente y a diferencia de otras estrellas Lloyd controlaba todas sus películas por lo que pudo mantener un ritmo de vida muy alto. El hecho de que sólo se casara una vez y su matrimonio durara hasta su muerte también contribuyó a no mermar su fortuna (su mujer era Mildred David, precisamente su compañera femenina en esta cinta)
Uno de los motivos por los que Harold Lloyd es menos conocido que otros cómicos de la misma época es porque Lloyd no quería que sus películas se pasaran por televisión, ya que pensaba que eran para verse en pantalla grande.
«El hombre mosca» (Safety Last !) es quizás su película más conocida y que se encuentra en la Biblioteca del Congreso. Aparece también su imagen más famosa, la de Lloyd colgado de un reloj en un edificio.
El argumento es el siguiente: Harold Lloyd (The Boy) sale de su pueblo con destino a la gran ciudad donde espera prosperar y casarse con su novia. Se emplea en unos grandes almacenes y es dependiente de telas a metros. Envía cartas y regalos a su novia haciéndole creer que su posición económica es mejor, por lo que ésta decide ir a buscarlo a la ciudad. Harold oye que el gerente de los almacenes ofrece una cantidad importante a quien sea capaz de mejorar las ventas o conseguir atraer más público y se le ocurre la idea de que un amigo suyo, experto en escalar edificios lo haga y se repartan las ganancias, pero, su amigo ha tenido problemas con un policía y en día de la escalada está más preocupado por esquivarlo que por subir la fachada, por lo que Lloyd deberá subirla él mismo.
Desde el primer fotograma nos encontramos con un gag memorable: parece que nuestro héroe está al pie del cadalso, pero en realidad está en una estación. Continua con un nivel muy alto de gags elaborados y brillantes hasta llegar al momento de la escalada. De una duración de 73 minutos total, la subida ocupa los último 20 minutos. Siendo una secuencia muy compleja.
Se ha hablado mucho de la realización de la secuencia de la escalada. En principio se asumía que todo había sido real y por el propio Lloyd. Al parecer hubieron varios trucos, muy bien hechos que disminuyeron la peligrosidad de la acción. Sin embargo, continuaba siendo extremadamente peligroso, además teniendo en cuenta que a Lloyd le faltaban dos dedos después de una explosión fortuita, lo que disimulaba con un guante ortopédico.
En definitiva, una obra maestra del cine cómico de su momento, que no puede dejar de verse.
ver también momentos  (detalle de la escena de la escalada)