Sólo el cielo lo sabe, 1955

«Sólo el cielo lo sabe»  (All that Heaven Allows)

Douglas Sirk
USA 1955

Valga lo que he dicho en el comentario anterior sobre «Imitación a la vida» (1959) del mismo director para esta película anterior.

Los dos protagonistas son Jane Wyman, la que fuera primera esposa del actor y presidente Ronald Reagan, y por la parte masculina Rock Hudson. Esta pareja asimétrica ya que ella tenía siete años más que él, repetía esquema después del éxito de «Obsesión» (1954) también de Sirk. El actor Rock Hudson era un habitual de las películas americanas del director alemán.

La historia trata de una viuda con dos hijos mayores que se enamora de su jardinero joven. Todo ello es visto por la cerrada sociedad de una pequeña ciudad de Nueva Inglaterra como un escándalo. Sin embargo, en lugar de un jardinero musculitos, como suele verse, en este caso se trata de un sensible y refinado botánico en ciernes inspirado por las ideas del Walden de Thoreau. Por lo que la unión de ambos es algo tan positivo que debe de estar bendecido por el Dios de los bosques.

La dirección, fotografía y ambientación tiene la elegancia clásica de los años cinquenta. A Rock Hudson cuesta creerlo, pero se puede soportar.

Imitación a la vida, 1959

«Imitación a la vida»  (Imitation of Life)

Douglas Sirk
USA 1959

v.o.s.

Douglas Sirk era un director alemán que llegó refugiado a Hollywood en los años cuarenta y más tarde regresó a Alemania. Esta película fue la última que rodó en Estados Unidos.

Sirk se especializó en un género menor, las películas llamadas «weepies» o sentimentales para mujeres, o lo que acabaría siendo los culebrones actuales. Lo que tenía de diferente en el caso del director alemán era que sublimó el estilo, creando unas cintas con un color magnífico, unos suntuosos escenarios y vestuario, con los que la televisión no podía competir. Además parecía que Sirk no solo se tomaba absolutamente en serio los argumentos, sino que los intensificaba, logrando que sus películas fueran ampliamente consideradas.

En este caso, la historia ya había sido llevada al cine en 1934 y sería interesante comprobar que tono y estilo tenía, para compararla con lo que hace Sirk con ella. Trata de una actriz viuda (Lana Turner) con una hija que busca trabajo en Nueva York. Coincide con una mujer de color y su hija que parece blanca a las que acoge en su casa, aunque de momento no tiene recursos. El mismo día también conocen a un fotografo (John Gavin) que jugará diversos papeles en sus vidas posteriores. Más tarde la actriz triunfará y permanecerán juntas, aunque la mujer de color siempre será su criada. Que la hija parezca blanca solo traerá complicaciones y un drama sin fin. Hay que tener en cuenta que la historia se sitúa antes que los afroamoericanos tuvieran derechos civiles

Yo no sé hasta que punto este tipo de películas gustaba a las mujeres de los años cincuenta. Es posible que así fuera. Vista ahora, la impresión es de un cine melodramático para gays. En el sentido de que pueden sentirse identificados con Lana Turner y atraídos por John Gavin. Decididamente Lana Turner me parece un icono gay, totalmente mitificable por «drag queens», gracias también al maravilloso vestuario que luce durante todo el largometraje.