El alienista, TV serie, 2018

the_alienist_tv_series-840831653-large«El alienista»

(The Alienist)

TV serie – 10 episodios de 45 min. aprox.

basada en la novela del mismo título de Caleb Carr

USA 2018

v.o.s.

Como nos repiten en cada episodio, en el siglo XIX a los locos se les llamaba «alienados» y a sus médicos «alienistas». Estamos casi al borde del siglo XX en Nueva York. El doctor Laszlo (Daniel Brühl) es el alienista. Tiene una cierta posición social. Se verá requerido ante un cadáver de un adolescente mutilado. Los casos seguirán ante la impotencia y la corrupción de la policía. El doctor será ayudado por un amigo dibujante (Luke Evans), y una mujer policía (Dakota Fanning).

Como serie funciona un poco como de segunda clase. La ambientación siempre es interesante. Supongo que el libro quería dar más énfasis a los propios problemas de los protagonistas, que aquí también aparecen, pero quedan subordinados a la típica historia de búsqueda de asesino en serie.

Ángeles en América, TV Serie, 2003

«Ángeles en América»  (Angels in America)

Mike Nichols

USA 2003

TV serie de 6 episodios de 1 hora aprox.

Me parece que esta serie no ha estado disponible en España hasta que la ha puesto en su catálogo la HBO. Tenía curiosidad porque había oído la banda sonora de Thomas Newman: preciosa como todas las suyas, aunque también todas muy parecidas.
Basada en una obra teatral de Tony Kushner, la acción se sitúa en los años ochenta: homosexualidad y sida (+ judíos de Nueva York y podríamos decir también mormones).
Hay varias historias entremezcladas, pero las más importantes son un joven homosexual enfermo de sida y un viejo abogado y mala persona, también homosexual y enfermo de sida, aunque no quiera admitir, ni una cosa, ni la otra.
El joven, pongamos que en sus delirios febriles imagina un ángel que hace que trascienda su realidad y se proyecte a espacios mentalmente más espirituales. Por otro lado, hay gente que sin duda son ángeles.
La serie tiene un reparto muy importante: Al Pacino, Mery Streep, Emma Thompson, Patrick Wilson, etc. lo que contribuye a darle un aspecto importante. Se ve con interés, aunque el papel del personaje de Al Pacino se hace muy largo y las apariciones angelicales son chocantes.

Asylum: El experimento, 2014

«Asylum: El experimento»  (Stonehearst Asylum -Eliza Graves-)

Brad Anderson
USA 2014

v.o.s.

Basada en un cuento de Edgar Allan Poe, es más un thriller que de terror.
Siglo XIX. Prácticas medievales o descabelladas para tratar los trastornos mentales, o internamiento en sanatorios de personas molestas.
Un nuevo doctor (Jim Sturgess) llega a un apartado y exclusivo sanatorio. Lo recibe el doctor en jefe (Ben Kingsley). Todo parece moderadamente normal, pero no es así.
La historia dentro de su género está bien y su evolución es satisfactoria, con giros interesantes. Una producción correcta que se beneficia de la presencia de algunos actores importantes: Kingsley o Michael Caine. La protagonista femenina es Kate Beckinsale de la que no puedo decir nada malo en este caso.

Amor y otras drogas, 2010

«Amor y otras drogas»  (Love and Other Drugs)

Edward Zwick
USA, 2010

«Amor y otras drogas» presenta una delicada y finalmente poco conseguida combinación entre una historia de amor melodramática, junto con una presentación visual y de desarrollo moderna, que toca tanto la denuncia a las farmaceúticas y los medicamentos «estrella», las relaciones sexuales, la comedia a través del personaje del hermano, las relaciones laborales de gran empresa a traves del personaje de Oliver Platt, la necesidad de comprar medicamentos más baratos en Canadá, etc. En fin muchas cosas y algunas de ellas bastante complejas. Sorprende que se utilicen los nombres reales de las empresas farmaceúticas y de los medicamentos, lo que le da más fuerza y realismo.
Sin embargo, todo acaba bastante diluido y nada acaba yendo a ninguna parte. Simplemente se impone la fuerza de los cuerpos y caras de los dos protagonistas: Jake Gyllenhaal (al que últimamente me gusta mucho ver) y Anne Hathaway, gracias a los cuales la película puede mantenerse en pie. Y al final queda el regusto de una historia melodramática y solucionada de forma clásica y convencional para gusto del espectador amante del happy end.