«La maldición de la flor dorada» (Curse of the Golden Flower)
Zhang Yimou
China, 2006
No sé como hablar de esta película en unas pocas líneas. A sabiendas que es un filme para su público, creo que es un trabajo extraordinario. Aunque a mí me guste muchísimo más la anterior «Hero», «La maldición de la flor dorada«, es decir el crisantemo, me parece una fascinante combinación de; espectacularidad, belleza, sensibilidad, interpretación, decorados, tratamiento del espacio, vestuario, movimiento de masas, ect… ect… No exagero si digo que contemplaba cada escena con una emoción próxima a las lágrimas (yo que ya no voy a ningún museo porque nada me emociona).
Aunque la haya, no es una cinta de acción y el tratamiento es más de obra teatral. En cuanto al argumento es propiamente una tragedia clásica, que se desarrolla lentamente, mayestuosamente, ante nuestra impasible mirada, como en «Edipo» todo lo que suceda llevará a la desgracia. Los personajes están atrapados por claras o más oscuras relaciones y se mueven con dificultad por el laberíntico Palacio Imperial, las puertas son leves cortinas enrollables de bambú transparente, como telas de araña y todo ello y al mismo tiempo encerrado en la Ciudad Prohibida. Son la familia imperial y estamos en el año 1000, aunque eso es lo de menos.
En cuanto a las interpretaciones…. sublimes, sin tocarse, sin besarse y tal cantidad de emociones expresadas. Gong Li, soberbia, extraordinaria, guapísima.
Hay un aspecto que destaca es este tipo de producciones y es una forma de filmar que Hollywood ha abandonado desafortunadamente. Se trata del espacio fílmico y del uso de gran cantidad de extras. En cuanto a los extras, puede solucionarse digitalmente, como de hecho se está haciendo (la trilogía del Señor de los Anillos o Gladiator). Pero a lo que parecen haber recunciado es al espacio. La cámara de «La maldición de la flor dorada» no teme alejarse en el espacio, porque está todo lleno. En cambio en las producciones occidentales se teme enfocar más allá de los metros controlados. Dirán que es más caro, pero más se gastan en efectos especiales que a veces no cunden tanto.
En fin, maravillosa e hipnótica película.